La ciudad de Antigua Guatemala, reconocida mundialmente por su patrimonio histórico y arquitectónico, está dando sus primeros pasos hacia la implementación de un sistema de transporte público eléctrico, un proyecto que incorporará 20 eBuses, lo que marca un antes y un después en la movilidad de la ciudad.
Sin embargo, a pesar del ambicioso plan, los desafíos legales y políticos han puesto freno al proceso, deteniendo su adjudicación en un impasse que podría retrasar la llegada de los primeros buses eléctricos.
Si los trámites legales se resuelven con prontitud, el escenario optimista proyecta que los primeros buses eléctricos podrían estar operativos en marzo o abril de 2025.
Este proyecto, liderado por la nueva administración de la Municipalidad de Antigua Guatemala, tiene como objetivo revolucionar el sistema de transporte público en la ciudad.
En entrevista con Mobility Portal Latinoamérica, Felipe Hernández, jefe de Movilidad y Parqueos de la municipalidad, detalla que actualmente el transporte colectivo en Antigua se caracteriza por su baja calidad y su nula transformación en décadas.
«En la Antigua Guatemala no hay ningún tipo de transporte eléctrico ni público digno. Lo que existe es un sistema colectivo que ha prevalecido sin cambios durante años», comenta Hernández, quien considera fundamental ofrecer un transporte adecuado para residentes y turistas.
Obstáculos legales y su impacto en el avance del proyecto
A pesar de contar con la planificación y aprobación municipal, el proyecto enfrenta un importante obstáculo: un amparo provisional que ha frenado la adjudicación.
Según Hernández, el proyecto ya había superado múltiples fases de aprobación en el Consejo Municipal, así como en la plataforma Guatecompras, donde se presentaron las bases y requerimientos para los posibles oferentes.
No obstante, a solo pasos de ser adjudicado, un recurso legal impuso una pausa en el proceso, derivado de intereses políticos más que de objeciones legales.
«Este tipo de amparos se suelen otorgar por intereses políticos y no por una falta de legitimidad legal. La situación es complicada y esperamos que la Corte de Constitucionalidad pueda resolver pronto para retomar el avance del proyecto», subraya.
Hasta el momento, la única empresa que ha presentado una oferta para la provisión de los buses eléctricos es CSS, una compañía con experiencia en el suministro de transporte eléctrico en diversas municipalidades de Guatemala.
De todas formas, la adjudicación no será oficial hasta que se resuelva el recurso legal en curso.
Una transición al transporte público eléctrico

Antigua Guatemala
La primera fase del plan incluye la puesta en marcha de 20 buses eléctricos que operarán en tres líneas estratégicamente planificadas para cubrir el casco histórico de Antigua, un área que sufre de alta afluencia vehicular, especialmente durante los fines de semana.
Este diseño está pensado para cubrir tanto los trayectos entre las aldeas del municipio y el centro histórico, como los sitios turísticos más relevantes, entre ellos el icónico Cerro de la Cruz.
“El casco histórico de Antigua es el eje central de la movilidad; sufre saturación los fines de semana por la visita de nacionales e internacionales. Por ello, nuestra prioridad es darle una cobertura eficiente en esta primera fase”, explica Hernández.
Cada línea de transporte ha sido diseñada con un propósito específico. Una cubrirá la ruta de este a oeste y otra de norte a sur, mientras que la tercera será una ruta turística, pasando por los principales puntos de interés y permitiendo que visitantes y locales puedan movilizarse de forma más ágil y sustentable.
Este sistema, además, busca reducir el impacto ambiental y el desgaste en la infraestructura histórica del casco urbano al disminuir el flujo de vehículos motorizados tradicionales.
Infraestructura de carga: un paso necesario para la implementación
Para asegurar el funcionamiento eficiente del sistema eléctrico, Antigua Guatemala también está trabajando en la instalación de una red de carga que permitirá la operación diaria de los 20 buses en las rutas definidas.
Esta infraestructura de carga se ubicará en una propiedad municipal y contará con un diseño eléctrico subterráneo para integrarse al entorno urbano sin impactar la estética de la ciudad.
“La infraestructura eléctrica en Antigua está bien preparada y cuenta con capacidad suficiente para soportar el proyecto de movilidad eléctrica sin afectar el suministro general”, indica Hernández.
La empresa eléctrica local ha confirmado que una de sus subestaciones puede suministrar la energía necesaria, lo cual permitirá una operación sostenible de la red de carga sin sobrecargar el sistema eléctrico municipal.
Mirando al futuro: movilidad sostenible para Antigua Guatemala
La implementación de este sistema de transporte público eléctrico en Antigua Guatemala no solo representa un avance en términos de movilidad, sino también una apuesta por la sostenibilidad y la preservación del patrimonio.
Para Hernández, este proyecto no solo modernizará el transporte en la ciudad, sino que también beneficiará al turismo y a la calidad de vida de los habitantes.
“El desafío aquí no solo es implementar buses eléctricos, sino hacer que el transporte público sea una alternativa viable, moderna y accesible para todos”, afirma.
Con esto, Antigua Guatemala daría un paso firme hacia un modelo de transporte más inclusivo y respetuoso con su entorno histórico y natural.