En colaboración con las marcas Kia y BYD, FlexAuto busca transformar la manera en que los mexicanos acceden a vehículos sustentables, ofreciendo un modelo que, aunque todavía está en fase experimental, promete marcar un antes y un después en la industria.
Desde su incursión en el mercado de la movilidad eléctrica, la firma enfrentó desafíos, pero también identificó grandes oportunidades. Luis García, uno de los principales responsables de esta iniciativa, explica cómo la compañía dio los primeros pasos en este nuevo territorio.
“Estamos comenzando con este modelo para México. FlexAuto está expandiendo coches eléctricos para entender cómo podemos ofrecer una solución más económica para el cliente”, comenta el experto, destacando la particularidad del modelo de renting que están desarrollando, el cual incluye servicios como mantenimiento y la instalación de cargadores en el domicilio del cliente.
La flota eléctrica de FlexAuto, que actualmente cuenta con cerca de 1.000 vehículos, está diseñada para crecer exponencialmente una vez que el piloto concluya y se afinen todos los detalles necesarios para asegurar el éxito del proyecto.
Con una fecha de lanzamiento definitiva proyectada para 2025, la compañía ya está trabajando en la logística y la infraestructura necesaria para soportar esta expansión.
En este sentido, García detalla: “Estamos terminando este piloto para lanzar el producto completo durante el próximo año”.
La instalación de cargadores eléctricos
Un aspecto fundamental del modelo de negocio de FlexAuto es la oferta de cargadores eléctricos incluidos en el contrato de renting. Este servicio integral busca eliminar las preocupaciones de los clientes sobre la instalación y el uso de estos dispositivos en sus hogares.
“Lo que hacemos es ofrecer el coche con todo incluido, incluyendo el cargador para el cliente. El cliente firma un pagaré o un título de crédito que corresponde al valor del producto en caso de que no lo devuelva”, señala el ejecutivo a Mobility Portal Latinoamérica.
Este enfoque permite a los usuarios elegir entre cargar su vehículo en un supermercado o en su casa, según lo que mejor se adapte a sus necesidades.
En relación a las inquietudes de los clientes, el experto asegura: “Lo que más vemos es una falta de información sobre los tipos de cargadores. El tipo de entrada de cargador universal o específico suele ser una duda inicial que los clientes tienen durante el arrendamiento. Otro tema constante es la disponibilidad de puntos de carga, ya que muchos clientes preguntan dónde pueden cargar sus coches o si hay cargadores rápidos cerca para no interrumpir su rutina diaria”.
Desafíos en la infraestructura de carga de México
Lo cierto es que uno de los mayores obstáculos que enfrenta FlexAuto es la infraestructura de carga del país azteca, un factor que puede determinar el éxito o fracaso de la movilidad eléctrica en el país.
“El mayor reto es la geografía. Moverse de un estado a otro implica grandes distancias, lo que complica la carga de vehículos eléctricos,” afirma García.
Para abordar este desafío, la empresa no solo incluye cargadores como parte de su oferta, sino que también promueve la expansión de la red de carga pública.
Por ello, el representante de FlexAuto también subraya la importancia de la colaboración entre el gobierno y la inversión privada para desarrollar regulaciones que fomenten el uso de coches eléctricos o híbridos en México.
El catálogo de FlexAuto
En su apuesta por la movilidad eléctrica, la firma optó por trabajar con varias marcas. “MG es una de las marcas más fuertes para nosotros por la facilidad de colocación en el mercado. En el segmento eléctrico, empezamos a trabajar con Kia, aunque más en el área híbrida, y con BYD, que estamos incorporando por su accesibilidad económica”, revela García.
Sin duda, esta diversificación de marcas permite a FlexAuto ofrecer una gama de opciones que se adaptan a diferentes necesidades y presupuestos.
¿Otros mercados de Latinoamérica?
Aunque FlexAuto se está enfocando actualmente en consolidar su piloto en México, la empresa no descarta la posibilidad de expandirse a otros mercados de Latinoamérica en el futuro.
“Tomamos un mercado a la vez y realizamos un piloto considerando todos los posibles escenarios: robos, choques, etc. Una vez que esos puntos están resueltos, lanzamos el producto con todas las marcas”, adelanta el especialista.