Actores claves de distintas dependencias gubernamentales, como el viceministro de Ambiente, Sergio Federovisky, se reunieron el viernes en el Primer Encuentro Argentino sobre Movilidad Urbana Sostenible y plantearon la postura de la gestión actual.
“Vamos a estimular toda migración de vehículos impulsados por combustión fósil hacia los eléctricos, pero sabiendo que no se trata de una solución en sí misma”, afirma Federovisky en diálogo con Portal Movilidad.
En ese sentido, el dirigente advierte que lo primordial en la transición es “la búsqueda de la sostenibilidad” y no el mero reemplazo de tecnologías.
“De lo contrario, se trataría solo de reemplazar los motores a combustión por eléctricos y eso es falso”, indica Federovisky.
En materia de electromovilidad, las cifras de Argentina avanzan a paso moderado.
El país registra un acumulado de ventas de 2151 vehículos eléctricos en los primeros meses del 2023.
Los 100% eléctricos alcanzan la cifra de 71 unidades vendidas, mientras que los híbridos presentan 1.815 matriculaciones, según un informe del Sistema de Información Online del Mercado de Automotores de Argentina (SIOMAA).
El 96,8% de la oferta de estos vehículos son importados mientras que el 3,2% restante se comenzó a fabricar de manera local, durante 2022, en su gran mayoría por la marca Coradir.
Al cierre del primer trimestre del 2023 se patentaron 36,4% unidades más que durante el mismo período de 2022.
La respuesta de Federovisky para la transición hacia una movilidad sostenible
Entonces, ¿cuál sería la clave según el viceministro? La “política completa”, la cual incluye a los elementos tecnológicos, pero también otros que hacen a la gestión del transporte.
“Por eso es importante que haya varios ministerios involucrados y que el Estado nacional lo haya tomado en este Gobierno como una finalidad concreta en su política pública”, asegura Federovisky.
Cabe recordar que el año pasado el exministro de Transporte de la Nación, Alexis Guerrera, junto con su equipo de trabajo, presentó el Plan Nacional de Transporte Sostenible. El objetivo principal es impulsar una transición hacia la eficiencia energética que sea “inteligente y resiliente”.
Entre las metas propuestas se establece que el 10% de las incorporaciones en el transporte de carga y de pasajeros sea con vehículos eléctricos y a gas. Además, se intentará convertir el transporte a energías limpias: el 50% al 2030 y el 100% a 2050.
Con esto, hacia el 2030 se busca reducir el uso de la nafta en un 3% y del gasoil en un 29%.
Esta sustitución de importación de gasoil se estima que significará un ahorro aproximado de 200 millones de dólares.
Por su parte, el Ministerio de Ambiente está atento al desarrollo de las baterías, tema que ha generado controversia en el país, y su posterior reciclaje.
“Ya mismo estamos trabajando en ese aspecto. A medida que va adquiriendo escala, vamos a tener una política consistente. Sin embargo, el Ministerio de Ambiente es consciente de que esa es su responsabilidad institucional”, concluye Federovisky.