La electromovilidad en Perú sigue avanzando a paso lento. A pesar que el país vio crecer sus ventas de vehículos eléctricos en un 133% el último año, la falta de un marco regulatorio claro sigue siendo el tema pendiente para lograr su consolidación.
A lo largo de los años, más de 20 iniciativas legislativas fueron presentadas en el Congreso, pero solo dos lograron llegar a dictamen en comisiones. Ninguna ha sido aprobada.
Ahora, con un nuevo año en marcha, el sector de la electromovilidad se pregunta: ¿Será 2025 el año en que Perú finalmente cuente con una Ley de Electromovilidad?
Un historial de promesas incumplidas
Desde hace casi una década, la electromovilidad es tema de debate en el Congreso peruano.
Son diversas las propuestas que buscaron incentivar la adopción de vehículos eléctricos a través de beneficios tributarios, financiamiento y mejoras en la infraestructura de carga.
El último gran intento ocurrió en 2024, cuando la Comisión de Economía, Banca, Finanzas e Inteligencia Financiera aprobó un proyecto de ley que establecía un marco regulatorio para la promoción e implementación del transporte eléctrico en el país.
Sin embargo, la iniciativa no prosperó y quedó archivada.
Este fracaso legislativo se dio a pesar del impulso del propio ministro de Economía y Finanzas, José Arista, quien había planteado convertir el Puerto de Chancay en un hub regional para el ensamblaje de vehículos eléctricos.
Fuentes del sector informan a Mobility Portal Latinoamérica que la falta de consenso entre los ministerios clave, como el MINEM (Ministerio de Energía y Minas), MINAM (Ministerio del Ambiente) y el MTC (Ministerio de Transportes y Comunicaciones), terminó por frenar cualquier avance.
Expectativas para 2025: escepticismo en el sector
Las fuentes del sector no son optimistas. Una de ellas, en diálogo con Mobility Portal Latinoamérica, aseguró que “todo ha quedado pendiente hasta julio de 2025”.
La sensación general es que no hay avances concretos y el tema no es una prioridad para el Gobierno.
El Ministerio de Economía y Finanzas (MEF) había trabajado en dos proyectos clave:
- Proyecto de Ley de Fomento y Desarrollo del Transporte Verde y Cero Emisiones.
- Proyecto de Ley de Impulso a la Electromovilidad.
Ambos incluían incentivos como la exoneración del Impuesto a la Renta para empresas que incorporaran vehículos eléctricos en sus operaciones, con tasas reducidas hasta 2032.
Sin embargo, ninguno de fue presentado formalmente, debido a la falta de consenso entre los ministerios involucrados.
Desde el MEF argumentan que las medidas deben ser sostenibles fiscalmente, evitando un impacto negativo en las finanzas públicas.
Por otro lado, algunos sectores sostienen que una ley de electromovilidad podría ser regresiva, beneficiando solo a un segmento de la población con mayor poder adquisitivo, lo que hace difícil justificar incentivos estatales.
China y el impulso al transporte público eléctrico
Una de las principales declaraciones de intención surgió tras la visita de la presidenta Dina Boluarte a China, donde se establecieron nuevas oportunidades de financiamiento para el sector, de las que aún no hay novedades.
El ministro de Transportes y Comunicaciones, Raúl Pérez Reyes, anunció un plan para sustituir las unidades de transporte público por vehículos eléctricos, financiado en gran parte por China.
Este proyecto incluye la reactivación de una propuesta para eliminar los impuestos a la importación de vehículos eléctricos destinados al transporte público y la promoción de taxis eléctricos como una opción de movilidad sostenible en el país.
Un mercado en crecimiento, pero sin apoyo estatal
A pesar de la falta de incentivos claros, el mercado de eléctricos muestra signos de crecimiento.
En enero de 2025, las ventas de autos 100% eléctricos aumentaron en un 133%, pasando de 186 a 435 unidades vendidas en comparación con el año anterior.
El ranking de marcas líderes en el segmento fue encabezado por:
- Volvo: 78 unidades (17.9% del mercado).
- BYD: 68 unidades (15.6%).
- JAC: 36 unidades (8.3%).
- Dongfeng: 26 unidades (6.0%).
- BMW: 23 unidades (5.3%).
Sin embargo, la electromovilidad en el país sigue representando un porcentaje muy bajo del total de vehículos vendidos, evidenciando la falta de incentivos que hagan más accesible la tecnología para un público masivo.