Bogotá está enfocando sus esfuerzos en el plan de ordenamiento, “Bogotá reverdece”, una hoja de ruta para transformar la ciudad a un transporte sostenible y de reorganización de territorio.
En este marco, existen directrices de obligatorio cumplimiento y un modelo de movilidad sostenible que descarboniza la ciudad. Entre ellos, el apostarle 100% a la electromovilidad en cinco líneas de metro.
Pero eso no es todo, Deyanira Ávila Moreno, secretaria distrital de Movilidad de la Alcaldía Mayor de Bogotá, explicó en el último especial de Portal Movilidad:
“Buscamos a través de la transformación energética migrar los buses de combustión diésel a cero y bajas emisiones”.
Y agregó: “Queremos a través de nuestro ordenamiento territorial y las diferentes políticas reducir completamente estas emisiones contaminantes, transformar nuestro transporte público y tender a nuestro transporte privado a cero y bajas emisiones”.
Metas al 2040 y presupuesto a futuro
Las autoridades se encuentran también adaptando la política pública de cero y bajas emisiones a través de un documento con una hoja de ruta a 2040, con la transición no solo del transporte público sino también del individual.
Este documento, al que Ávila Moreno hizo alusión en el evento, tiene como meta para el año 2040 lograr el 100% de la flota del Sistema Integrado de Transporte Público cero emisiones.
“Lograr esa meta es bastante ambiciosa, pero Bogotá se esta dejando los presupuestos programándose para estas vigencias futuras para que, efectivamente, la flota de transporte público se consolide en electrificación”, afirmó la secretaria.
Un dato no menor es que la ciudad ya cuenta con una flota de 1485 buses eléctricos en funcionamiento.
Sobre esta experiencia, Ávila Moreno aseguró: “La apuesta por la electrificación no es barata. Es una inversión bastante grande, pero en mediano y largo plazo genera beneficios”.
También comentó sobre la necesidad de herramientas financieras: “No se logra sin cooperación, pero hay que hacerlo”.
No obstante, afirmó: “Bogotá le sigue apostando a esta electrificación”.
La secretaria considera que como ciudad capital tiene la obligación de ser innovadora y hacer bien la tarea en una especie de modelo para el resto de las ciudades.
“Adicionalmente, tratamos de generar una red de electrolineras en la ciudad como una de las metas del plan de desarrollo para generar el suministro en diferentes vías de Bogotá”, compartió la funcionaria.
Espacio para el hidrógeno
En marzo, de la mano de Transmilenio, Fenoge, Fanalca, Ecopetrol, Marcopolo y la alcaldía, el primer bus a hidrógeno del país vio la luz y ahora espera por su debut en las calles hacia julio.
“No queremos cerrarnos solo a la electrificación sino abrirnos a las posibles nuevas tecnologías que lleguen de bajas emisiones porque es necesario explorar e innovar”, puntualizó Ávila Moreno.
La inversión total del proyecto fue de 22 mil millones de pesos, de los cuales el Fondo de Energías No Convencionales otorgó nueve mil millones; Ecopetrol, alrededor de ocho mil millones; y Fanalca, unos cuatro mil millones.
La secretaria consideró que la ciudad va por buen camino, que se trata de un trabajo que no debe parar y que debe ser constante a pesar del cambio de alcaldes o secretarios.
“Bogotá le seguirá apostando a la tecnología, a la electrificación, a migrar todos sus sistemas de transporte y ayudar a los privados que migren sus vehículos”, cerró.
La participación completa en el evento de Portal Movilidad denominado “Electromovilidad en Colombia: portafolio de nuevos proyectos e inversiones 2023” queda disponible a continuación: