Uruguay apunta a duplicar este año el número de puntos de carga para vehículos electrificados. Hasta el momento, es la Administración de Usinas y Trasmisión Eléctrica (UTE) la que ha instalado, en su mayoría, las estaciones.
Hasta el momento son 140 las que pueden encontrarse en territorio nacional, mientras UTE busca terminar el año con 300 puntos de carga distribuidos cada 50 kilómetros.
Asimismo, en diciembre, el Ministerio de Industria, Energía y Minas exhortó al ente para que dispusiera beneficios para aquellos privados que quisieran invertir en este mercado.
De esta manera, desde el Gobierno nacional, se incita a las empresas interesadas a acceder a este beneficio para dotar de estaciones de carga rápida a espacios de acceso público. El plazo para su obtención se extiende hasta el 28 de febrero de 2025 o hasta llegar a los 150 beneficiarios.
¿Cuál es la estructura de costos para la instalación de los puntos de carga?
Según la Guía de Movilidad Eléctrica Urbana del Uruguay, publicada a principios del año pasado, son cinco los puntos que componen esta estructura. A saber:
- Preparación del lugar: hace referencia a todos los costos asociados a adecuar físicamente (obras civiles) las instalaciones donde estaría localizado el cargador.
- Instalación de equipos: costos asociados a los trabajos que se requieren al adecuar en condiciones óptimas una estación de carga con uno o más cargadores
- Servicio de operador de red: todos los costos asociados a las adecuaciones de las redes eléctricas por parte del operador de red para poder suplir de energía eléctrica a la o las estaciones de recarga. Estos trabajos contemplan ampliación de redes, repotenciación de redes, adecuación en protecciones eléctricas, entre otros.
- Transformador: la necesidad de atender grandes cargas, como podría llegar a representar un cargador nivel 2, o incluso más de uno, suele requerir de un transformador dedicado capaz de alimentar el o los cargadores con los valores nominales de tensión y potencia requeridos. Con esto se evita sobrecargar la infraestructura previamente dispuesta en el lugar de conexión.
- Equipo de recarga: Se vincula al costo del equipo de recarga.
Tanto los costos por el transformador, como también los asociados a los servicios por parte del operador de red, pueden ser optimizados al instalar más de un cargador por estación de recarga.
Esto se debe a que el costo total por cargador disminuiría en función del aprovechamiento máximo sobre la infraestructura especializada (dedicada) a suplir la demanda conjunta de energía eléctrica que representa cargar los vehículos.
El documento también esboza la diferencia entre la instalación de carga residencial y de acceso público, indicando que en esta última los costos para la preparación del lugar y las instalaciones eléctricas pueden representar entre el 18% y el 31% del costo total de instalación por cargador.
En relación a la optimización de costos sobre la operación del servicio, desde el trabajo realizado por la consultora Hinicio se indica:
“Según la cantidad de cargadores y el nivel de carga de estos, los costos asociados a los servicios del operador de red podrían llegar a oscilar entre el 9% y el 20% del costo total por cargador. La manera más efectiva de optimizar este costo es encontrando la cantidad de cargadores que minimicen la necesidad de ampliar las redes eléctricas, pero que a su vez satisfaga las necesidades energéticas de la flota vehicular que estos atenderán”.
Naturalmente el costo más representativo corresponde al equipo de carga. Este puede representar distinto porcentaje en función del tipo de carga. Apuntando a carga con alta potencia – entre nivel 4 (150 kW) y nivel 5 (350 kW), puede significar hasta el 52% del costo total.
En el primer caso se calculan USD 140.000 USD, mientras que en el segundo hasta USD 190.000. Disminuyendo en los costos totales de los cargadores en espacios públicos, para el nivel 3 estima un costo de USD 120.000 y el nivel 2 comercial USD 20.000.