Chile | Vehículos Eléctricos
viernes 08 de noviembre de 2024
"Planificación estratégica". La clave de Gobierno que destaca a Chile en el mercado eMobility latinoamericano
La superintendenta de Electricidad y Combustible de Chile, Marta Cabeza Vargas, analiza la situación de la electromovilidad chilena, de cómo el acompañamiento estatal hizo crecer el sector y las perspectivas para el año que viene.
Marta Cabeza Vargas, superintendenta de Electricidad y Combustibles de Chile.
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La superintendenta de Electricidad y Combustible de Chile, Marta Cabeza Vargas, destaca el proyecto de ley de Transición Energética que se encuentra en tratativas en el Congreso y señala la importancia de la política pública en la participación de la movilidad sostenible. 

«Más allá de la de la intención de llevar adelante la carbono neutralidad de cara al año 2050, hay una ley que hay que cumplir«, afirma la funcionaria a Strategic Energy Corp, en referencia a la ley marco de cambio climático en la República de Chile. 

Y agrega, durante la Semana de la Energía de la Organización Latinoamericana de Energía (OLADE): «Por lo tanto, ahí la institucionalidad se hace cargo de algo que es un interés local».

Chile apoya su impulso hacia la electromovilidad en el extenso entramado de legislaciones, normativas y regulaciones referidas al sector energético y con la mira puesta en los vehículos eléctricos, su seguridad y la circulación.

Este acompañamiento puede verse en las importantes ventas y una marcada expansión respecto de los demás países de la región.

Según la Asociación Nacional de Automoción de Chile (ANAC), el mes de septiembre fue el más importante en materia de comercialización de unidades, cerrando el balance mensual con un crecimiento de 149,1%, respecto del mismo mes del año anterior.

Asimismo, si se pone el foco sobre la comercialización de coches eléctricos, las ventas del mes de septiembre -último mes registrado por la entidad chilena- aumentaron 480,6% y ya suman 2.665 unidades vendidas en lo que va del 2024, lo cual convirtió al noveno mes en el mejor registro histórico desde que se tiene censo de las mismas.

La funcionaria destaca que en la nación chilena han avanzado en el «acompañamiento de una planificación estratégica, con foco en la renovación de la matriz», en el marco de una ley de almacenamiento de energía, y apuntó que el congreso chileno está en estos días tratando un proyecto de ley para la transición energética.

El peso de la legislación en Chile

«Las tecnologías avanzan más rápido que la normativa pero es necesaria la normativa para varios aspectos, sobre todo en lo que tiene que ver con el uso seguro y de calidad de las energías», apunta Cabeza Vargas.

En el marco de la Semana de la Energía 2024, el país se presentó ante los participantes como “el país que, después de China, tiene mayor cantidad de buses eléctricos” y repasó la importancia que tienen las políticas públicas de promoción de la electromovilidad.

«De la misma manera que los desarrolladores colocan sus proyectos en la vía pública para carga rápida, también deben cumplir con aspectos de implementación de seguridad en sus elementos en la vía pública. Esto está acompañado con un fuerte desarrollo que ha posibilitado la incorporación de muchas marcas de automóviles en el mundo, que está bien restringido por la normativa», define. 

Y añade: «Hay una apertura que es una intencionalidad clara de llevar adelante la electromovilidad».

No obstante, aún queda mucho camino por recorrer.

Según pudo informar este medio, dos de cada tres comunas chilenas (64% del total) no tiene instalaciones de carga en su territorio: la cantidad de cargadores instalados en todo el territorio nacional aumentó un 23.8% respecto de 2023, mientras que sólo 126 de las 220 comunas cuentan con estaciones de acceso público.

La superintendenta arriesga una perspectiva de cara al próximo año en materia de electromovilidad, y describe el acompañamiento popular y estatal realizado en Chile al sector para su crecimiento constante.

«Ya están todas las normativas y las que acompañan la normativa de los reglamentos, lo cual hace posible que los desarrolladores lleven adelante sus proyectos. Vamos acompañando la tecnología con una normativa robusta, pero que tiene una característica: es siempre bajo consulta pública”, explica.

Del mismo modo, Cabeza Vargas sostuvo: “Normalmente los cuerpos normativos hacen una consulta pública antes de emitir y normalmente cinco o seis años después. Aquí (en Chile) lo hacemos año para incorporar algo que es ágil. La tecnología es nueva, la tecnología avanza y la normativa lo hace de la misma manera», analizó.

Seguridad y electromovilidad

Al ser consultada sobre las políticas referidas a la ampliación del parque automotor eléctrico y la situación de la electromovilidad en Chile, la superintendenta profundiza sobre la situación normativa de Chile, en donde la ampliación del marco regulatorio referido a la circulación de vehículos eléctricos fue un invaluable punto de apoyo para su promoción.

«Desde el punto de vista de la seguridad y la calidad, lo que nos convoca es ver que los usuarios tengan un elemento seguro. Recordemos que el auto es un elemento que se enchufa a la red”, asegura la funcionaria.

“Todo elemento que se conecta a la red tiene que tener un aspecto de seguridad. Eso lo que hace es abrir los mercados pero también le impone la obligatoriedad de una cierta certificación en seguridad y calidad de aquellos elementos que se conectan a la red», describe Cabeza Vargas.

Debatir la energía como región

La Semana de la Energía es un evento que se realiza todos los años donde líderes del sector energético, investigadores, funcionarios y expertos se reúnen para debatir e intercambiar iniciativas, proyectos, ideas y perspectivas de cara al crecimiento de las energías renovables en América Latina.

El evento promueve la colaboración entre gobiernos, empresas, academia y agencias internacionales para innovar y fomentar la equidad en el sector energético.

Temas clave incluyen energías renovables, transiciones 2.0, equidad de género y adaptación energética. Participarán representantes de los 27 países miembros de la Organización Latinoamericana de la Energía (Olade) y destacados referentes del sector energético público y privado. Esta edición anunció la participación de 3461 asistentes, 247 conferenciantes y más de 54 eventos centrados en la energía en la región dentro del contexto global.

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