Así se desprende del ‘Barómetro de Electromovilidad’ del segundo trimestre de 2023 de la Asociación Española de Fabricantes de Automóviles y Camiones (Anfac).
Según este informe, España sigue sin salir de los puestos de cola del desarrollo de infraestructura de recarga de acceso público en el ranking de Europa.
De acuerdo al indicador de infraestructura de recarga, apenas logra crecer 6 décimas, obteniendo un total de 5,1 puntos sobre 100 y situándose antepenúltima en el ranking del continente.
A nivel nacional, el ranking lo lidera Castilla y León con 8,2 sobre 100, pero son Asturias y Castilla-La Mancha, con aumentos de 2 y 1,2 respectivamente, los que logran una mayor mejora en este periodo.
Durante el segundo trimestre, se han puesto en marcha 2.517 nuevos puntos de recarga de acceso público. Esto supone 4.632 nuevos cargadores en este 2023, lo que sitúa en 22.760 el total para el territorio nacional.
Una infraestructura de recarga de acceso público que “se mantiene muy lejos, tanto en número como en potencia instalada, del objetivo de 45.000 puntos necesarios este año y cumplir con los objetivos de reducción de emisiones marcados en el Fit for 55”, señala Anfac.
A esto hay que sumar que hay 6.704 puntos de recarga de acceso público que no están operativos por la falta de algún trámite burocrático o problema. Es decir, un 23% de la infraestructura de recarga de acceso público instalada en España cuelga el cartel de ‘fuera de servicio’.
Si estos puntos estuviesen operativos, habría 29.464 puntos a disposición de la población.
Puntos de baja potencia
De los nuevos instalados en el segundo trimestre, 1.843 puntos de recarga tienen una capacidad inferior o de hasta 22 kW.
“Es decir, que el 73% del crecimiento de puntos se produce en este rango de potencia baja”, lamenta esta asociación, que destaca que solo el 4% de la red de recarga de acceso público (875 puntos en total) en todo el territorio nacional es de potencia superior a 150 kW”.
“Tan importante es la capilaridad como la calidad de los puntos de recarga de acceso público”, recuerda Anfac.
Tal y como incide, “el despliegue de este tipo de infraestructuras de alta potencia, que permite recargas similares a la experiencia de repostaje de un vehículo de combustión interna, es esencial para el desarrollo del vehículo eléctrico y absolutamente prioritaria para la movilidad eléctrica con vehículos pesados”.
Mercado de vehículos electrificados
Respecto a la penetración del vehículo electrificado, en el segundo trimestre del año obtiene una valoración media de 18,9 puntos, que representa un crecimiento de 1,5, respecto al trimestre anterior.
“Si bien logra un crecimiento equiparable al aumento de 1,8 registrados en la media europea”, destacan en este informe, “todavía se mantiene muy lejos de los 38,7 puntos sobre 100 que obtiene el conjunto europeo, situando a España 20 puntos por debajo”.
Así, España ocupa las últimas posiciones del ranking, “muy lejos de los países líderes como Países Bajos, Alemania y Reino Unido, situados por encima de la media europea”.
Durante el primer semestre del año, España ha matriculado un total de 55.544 turismos electrificados (BEV+PHEV), “mejorando los registros del año anterior”, pero “todavía muy lejos” del objetivo de 190.000 ventas de este tipo de vehículos para todo el ejercicio 2023.
Infraestructura de recarga de acceso público fuera de servicio