Brasil | Vehículos Eléctricos
lunes 12 de junio de 2023
Brasil llega a mitad del 2023 sin política pública en electromovilidad
Avanza el año pero no las regulaciones y políticas públicas para movilidad eléctrica a nivel nacional. Mientras tanto las asociaciones presentan proyectos y los Estados se adentran en la conversión de las flotas públicas.
Brasil- Lula
No avanza el marco regulatorio para electromovildidad en Brasil.
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Siendo Brasil uno de los mercados más importantes de Latinoamérica para la industria automotriz y a pesar del interés que demostró en  movilidad eléctrica el presidente de Brasil Luiz Inácio Lula Da Silva, el país aún no cuenta con un marco regulatorio estructurado.

Si bien existen normativas que contemplan incentivos económicos, no trazan una estrategia nacional.

En esa línea, a lo largo de las últimas gestiones de gobierno nacionales no se pusieron en marcha políticas públicas.

Sin embargo, según el análisis del Ministerio de Minas y Energía el país desarrolló condiciones energéticas propicias para la aplicación de la tecnología.

Esto se debe a que el promedio mundial de fuentes renovables en la matriz eléctrica es solo del 28% mientras que Brasil cuenta con más del 85%.

En ese sentido, la Ley 6.020/2019 de la senadora Leila Barros apunta a la creación de una política de incentivos fiscales para el desarrollo de la movilidad eléctrica e investigaciones en torno a ello.

Por otro lado, el Gobierno otorga como incentivo la reducción del Impuesto de Importación para la compra de autos eléctricos. Como resultado el valor del 35% se redujo a 7% o 0% dependiendo de la tecnología del vehículo.

Además, rige la Ley 13.755 conocida como “Ruta 2030”, antes InovarAuto, que reduce el Impuesto de Productos Industrializados (IPI) en la venta de unidades electrificadas.

Esta aplica el 1,5% del beneficio tributario a investigación para el desarrollo de tecnología de vehículos eléctricos.

Asimismo, en 2022 se creó un Frente Parlamentario Mixto por la Electromovilidad formado por senadores y diputados federales pero poco se debate hasta el momento.

A modo de complemento, la Asociación Brasileña de Vehículos Eléctricos (ABVE) y el Instituto de Ingeniería de Brasil (IE) abogan en la Carta de la Electromovilidad por una política nacional sobre movilidad eléctrica.

El documento destaca puntos positivos para promover la transición teniendo en cuenta la industria de vehículos y componentes ya instalados, usuarios interesados en modelos electrificados y el potencial de los municipios para reemplazar la flota de buses y vehículos de carga.

Entre los partidarios de la Carta figuran la Asociación Brasileña de la Industria Ferroviaria (ABIFER), la Asociación Nacional de Transporte Público (ANTP) y el Instituto Brasileño de Movilidad Sostenible (IBMS).

Regulaciones en Estados de Brasil

En contrapartida, varias prefeituras eximen a los vehículos electrificados de pagar IPVA y rotación.

Se nota un ascenso en los municipios que ponen en marcha normativas locales y convierten a eléctricas sus flotas públicas.

El Estado de São Paulo aplica la Ley Municipal 16.802 que establece las metas para la electrificación y estima que la reducción de las emisiones por transporte deben llegar al 50% en 2028 y  al 100% en 2038.

En ese sentido, ya circulan buses eléctricos como parte de las operaciones urbanas en las ciudades de Belém (PA), Fortaleza (CE), Salvador (BA), Vitória (ES), Brasilia (DF), São José dos Campos, Bauru, Santos, Campinas (SP), Maringa (PR) y Rio de Janeiro (RJ).

Recientemente, el municipio de Cascavel (PR) junto al Banco Regional de Desarrollo del Extremo Sur (BRDE) firmaron un contrato que garantiza fondos para la adquisición de 15 vehículos eléctricos hacia 2024 que serán alimentados por la planta fotovoltaica local.

En su plan también incluyen autobuses eléctricos como base de su movilidad urbana.

La ciudad de São Paulo prevé tener a finales de 2024 una flota de 2.600 autobuses eléctricos, al igual que Curitiba.

En el mismo plazo se incorporarán más unidades en Santa Catarina, la región del Vale do Itajaí, en un proyecto que conectará 11 municipios.

Respecto a particulares los propietarios de automóviles eléctricos no pagan IPVA en Paraná, Rio de Janeiro, Mato Grosso do Sul, Maranhão, Piauí, Ceará, Rio Grande do Norte y Pernambuco.

Asimismo, el Instituto de Políticas de Transporte y Desenvolvimiento (ITPD) lanza el estudio Innovaciones Contractuales referido a la electrificación del transporte de los municipios donde califica a los contratos actuales de “poco flexibles” y llama a una revisión para modelos de financiación equitativos.

En ese orden, las estrategias mencionadas se alinean con el compromiso dictado en la Agenda 2030 que compete a países de América Latina y el Caribe en materia de sostenibilidad ambiental y transición a energías limpias.

El punto de inflexión continúa dándose en la falta de infraestructura. Brasil tiene pocos lugares para carga pública y la mayoría de estos son cargadores de potencia lenta.

Por esto mismo, los municipios alientan a crecer en opciones de cargadores rápidos y ultrarrápidos.

Electrificados en auge en Brasil

La consultora global Boston Consulting Group pronostica que para 2030 la flota de vehículos electrificados se multiplicará a nivel mundial y afirma que en Brasil se necesitará una inversión de R$14 mil millones en infraestructura de carga hacia 2035.

Por su parte, los privados auguran un buen desarrollo en el mercado y anuncian mes a mes la incorporación de nuevos modelos a comercializarse en el país.

Las ventas de electrificados ascienden notablemente en lo que va del 2023 y las 6.435 matriculaciones de mayo representan un aumento del 90% respecto a las 3.387 de mayo de 2022 y del 34% frente a las 4.793 unidades patentadas en abril de este año.

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