Latam | Vehículos Eléctricos
viernes 03 de febrero de 2023
Aunque Latinoamérica queda «out del top 10» ocho ciudades figuran en ranking de movilidad sustentable
Varias ciudades claves de la región forman parte de la lista que incluye a 60 globales que se esfuerzan por desarrollar un sistema de transporte sostenible. ¿Qué puesto ocupa cada una?
Medios de transporte eléctricos.
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El Urban Mobility Readiness Index 2022 Report es un estudio que clasifica a 60 ciudades globales según qué tan preparadas están para afrontar sus desafíos vinculados a la movilidad futura. Fue realizado por Oliver Wyman Forum y la Universidad de California en Berkeley.

Para efectuar el análisis se tuvo en cuenta el Sustainable Mobility sub‑index (subíndice de Movilidad Sostenible), lanzado por primera vez en 2021, que mide los esfuerzos de las urbes por construir ecosistemas más verdes. En él se incluyen ocho ciudades latinoamericanas.

Para ubicarlas en el ranking, los estudiosos tuvieron en cuenta distintas métricas, tales como inversión de los gobiernos en estaciones de carga, densidad de las electrolineras, incentivos para vehículos eléctricos, cantidad de autos cero emisiones en venta, zonas libres de coches, utilización del transporte público, calidad del aire, entre otras.

Vale mencionar que el estudio considera como sostenible a aquellos sistemas y soluciones que no degradan el medio ambiente o la salud de los residentes y que, incluso, pueden ofrecer beneficios económicos

A continuación, la lista de las ciudades de América Latina con sus puestos correspondientes.

Bogotá

La primera urbe de la región en aparecer en la lista es Bogotá, Colombia, ubicada en el lugar número 34.

Lo cierto es que las autoridades bogotanas dan prioridad a la electrificación del transporte, desarrollando zonas libres de coches a diésel (donde la calidad del aire es alta), invirtiendo en infraestructura de recarga y ofreciendo incentivos para la adquisición de vehículos eléctricos. Además, se enfocan en el desarrollo de flotas de buses eléctricos.

Sin embargo, la densidad de los puntos de carga y la cuota del mercado de autos cero emisiones siguen siendo relativamente bajos.

Asimismo, la aplicación de las leyes de tránsito es limitada y las muertes por accidentes empeoraron en los últimos años, dando a la ciudad una mala calificación en seguridad vial.

Ciudad de México

Ocupa el puesto número 36 dentro del Sustainable Mobility sub‑index.

El Gobierno nacional realiza grandes inversiones en movilidad a nivel nacional. Además, ofrece beneficios monetarios y no monetarios para fomentar la adopción de vehículos eléctricos, los cuales resultaron efectivos. No obstante, según indica el reporte, aún hacen falta reglamentaciones.

Vale mencionar que todavía se encuentra subdesarrollada en lo que respecta al sistema de gestión de tráfico, así como en la aplicación de normas de seguridad en el sistema de pasajeros.

Sao Paulo

Está ubicada en el lugar número 37, dado que las autoridades locales y nacionales buscan impulsar la adopción de autos cero emisiones a través de incentivos fiscales y no fiscales. También establecen restricciones de circulación a vehículos a combustión.

La ciudad está conectada por una fuerte red multimodal compuesta por el metro, autobuses y ferrocarril. Sin embargo, los precios de boletos son altos en relación con los ingresos locales, quedando fuera del alcance de los residentes más pobres.

Ciudad Autónoma de Buenos Aires (CABA)

CABA ocupa el puesto número 40 dentro de la estadística. Se destaca por contar con un transporte público asequible, el cual cuenta con un índice alto de uso. Sus redes incluyen colectivos tradicionales, tranvías y trenes de cercanías.

A pesar de que un gran porcentaje de la población argentina trabaja en el sector, la ciudad lucha con la eficiencia de la cadena de suministro debido a la débil infraestructura logística del país.

Santiago

La urbe chilena se encuentra en el lugar número 42 del ranking. El documento indica que Santiago se ve beneficiada gracias a la buena conexión de la red vial que el país posee.

Además, el servicio de pasajeros –conformado por el metro, buses y trenes- es asequible e incluye un sistema tarifario integrado que requiere de una única tarjeta inteligente.

No obstante, dispone de pocas universidades y laboratorios enfocados en la movilidad y no son muchas las empresas que buscan impulsar la innovación.

Quito

La ciudad ecuatoriana ocupa el puesto número 45. La transición a modos de transporte sostenibles se ve beneficiada gracias a que la tasa de propiedad de automóviles es baja.

Asimismo, Quito creó un fuerte sistema de pasajeros que ofrece el servicio a precios asequibles, provocando su uso extendido.

Pero cuenta con un ecosistema de innovación limitado, con pocas universidades y laboratorios que puedan liderar la investigación en movilidad.

Río de Janeiro

La ciudad brasileña se encuentra en el lugar número 49 dentro de la estadística ya que las autoridades tienen el foco puesto en el sector.

Posee un Plan de Movilidad Urbana Sostenible al cual se le atribuye, por ejemplo, el haber ampliado el alcance del transporte público a más residentes de bajos ingresos.

Si bien el sistema incluye micros urbanos, minibuses, ferris, un metro y trenes, lo cierto es que Río, como todo Brasil, cuentan con infraestructuras y carreteras de mala calidad.

Lima

La ciudad peruana ocupa el puesto número 52. Tiene posibilidades de desarrollar la electromovilidad en el futuro.

Por ejemplo, la red de transporte público se volverá más expansiva ya que se están construyendo múltiples líneas de metro como parte de un Plan Nacional de Infraestructura.

Pero, actualmente los residentes se quejan de los altos niveles de contaminación lumínica y sonora. Además, las autoridades han hecho poco para estimular la innovación -con inversiones limitadas- y el sector de investigación no es suficiente para desarrollar nuevos servicios de movilidad.

En resumen, el estudio muestra una radiografía de América Latina donde, gracias a las deficiencias que la región posee en el sistema de transporte público, las ciudades latinas se encuentran en los últimos puestos.

Sin embargo, se destacan los esfuerzos por estimular la adopción de buses cero emisiones, crear y aplicar incentivos para la adopción de vehículos electrificados y desarrollar infraestructura de carga.

En efecto, se espera que estas iniciativas puedan llevarse a cabo de manera efectiva durante el 2023 para que en las próximas estadísticas las ciudades latinoamericanas puedan subir algunos escalones.

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