México está posicionado como un país con grandes oportunidades en la industria automotriz. El camino inició hace 30 años con el Tratado de Libre Comercio entre México, Estados Unidos y Canadá.
Hoy, México es el cuarto exportador de vehículos ligeros a nivel mundial y el cuarto exportador de autopartes; además, el primer exportador de vehículos ligeros hacia Estados Unidos (4.68 millones de dólares en 2020) y el primer exportador de refacciones (60,851.38 millones de dólares en 2019).
Unas de las principales tendencias que están cambiando la industria automotriz son la electrificación y autonomía de los vehículos.
Carlos Meneses, coordinador del Programa Automotriz de la Fundación México-Estados Unidos para la Ciencia (Fumec), explica que, en 2024, los vehículos eléctricos (VE) comenzarán a costar lo mismo que un auto tradicional y, “en Estados Unidos, que es nuestro mercado principal, predominarán los autos eléctricos en 2030”.
Lo anterior, menciona, provocará que el balance de demanda de Estados Unidos hacia México cambie: bajarán los requerimientos de autopartes para vehículos de combustión interna y aumentarán los de autos eléctricos.
Uno de los principales impactos en la industria se refleja en el valor de contenido actual del vehículo. El directivo de Fumec detalla que el valor de la materia prima aumenta: se usarán aquellas como neodimio y litio; se reducen los componentes (como partes de motor, bielas, cilindros); y entran nuevos proveedores de baterías y motores eléctricos (que aportan el mayor valor de contenido).
El último punto provoca que, ahora, las armadoras implementen procesos de baterías y motores para aportar ese valor.
Anuncios de fabricación de vehículos eléctricos en México
- Moldex Estado de México – Producción de vehículo eléctrico utilitario de reparto – junio 2016.
- IUSA Estado de México – Producción de cuatro modelos eléctricos – febrero 2018.
- Zacua Puebla – Planta de producción de vehículos eléctricos – 2018.
- Ford Cuautitlán Izcalli – Inicio de producción de Mustang Mach-E – noviembre 2020.
- General Motors Ramos Arizpe – Transformación de fábrica para producir vehículos eléctricos – abril 2021.
- Questum e e.GO Nuevo León – Construcción de microfábrica de vehículos eléctricos en México – mayo 2021.
- LINK EV Electric Vehicles – Inversión en planta ensambladora en Puebla – enero 2022.
- Volkswagen Puebla y Silao – Actualización de complejos para ensamble de vehículos y componentes eléctricos – marzo 2022.
Así se preparan los proveedores
Ricardo Apaez, director de innovación del Cluster Automotriz de Nuevo León y director general del Centro DRIVEN, informa que las empresas proveedoras están buscando su posición para responder al cambio en la industria automotriz: algunas de ellas, las que llevan la delantera, están realizando análisis de sus capacidades y los componentes que fabrican en relación con los requerimientos que se mantienen, los que se modifican, los que dejan de existir y los nuevos.
Con base en ello, según México Industry, se han planteado estrategias de inversiones, mantenimiento de infraestructura, desarrollo de nuevos productos y acercamiento con los clientes.
De acuerdo con PwC (citado por Fumec), se estima que la proporción del valor del auto atribuible al tren motriz y los sistemas electrónicos crecerán significativamente: del 44% en 2015, a un 52% en 2025.
El cambio sucederá a expensas del valor del chasis y la carrocería e interiores, debido a la transición a VE y a las tendencias de mayores servicios de conectividad y asistencia al conductor.
Para tomar las oportunidades que trae consigo la fabricación de VE, Apaez sugiere:
1. Identificar los subsistemas (nuevos) similares a los que se fabrican hoy en día. «Si venimos de una industria de estampado, maquinado, fundición o forja de piezas, podemos empezar a buscar cuáles de ellas son similares en el vehículo eléctrico que se requieran hacer con esos tamaños, pesos o materiales”.
2. Agregar a sus procesos capacidades de ensamble con soldadura, remachado, atornillado, adhesivos, pruebas de calidad (fugas, hermeticidad, funcionalidad).
3. Analizar la incursión en un enfoque de negocio nuevo. «El vehículo eléctrico y el autónomo tienen un alto contenido de sistemas eléctricos, electrónicos, de software de control y algoritmos. Esos son los nuevos nichos de oportunidad; implican inversión y riesgos, pero para quien lo logre, le espera un gran futuro».
En tanto, Carlos Meneses Rosales resalta que, actualmente, las empresas están buscando proveedores para la producción de vehículos de 2026 en adelante, por lo que el tiempo para la transformación de los proveedores de la cadena tradicional es de tres a cuatro años como máximo.
Componentes para VE que se fabrican en México
- Battery case/housing – subsistema mecánico nuevo.
- Paneles de instrumentos.
- Paneles de pantallas.
- Paneles de aire acondicionado.
- Módulos de control de motores.
- Inversores.
- Transmisiones para el tren motriz eléctrico.
- Sistemas avanzados de asistencia a la conducción.
- Carcasas.
- Embobinados.
- Partes móviles y estructurales.
- Ejes.
- Arneses.
Nichos de oportunidad en materias primas y componentes
- Aceros avanzados y sus aleaciones.
- Aluminio en high pressure die casting para componentes estructurales.
- Perfiles de aluminio extruído para estructura de battery case.
- Plástico con propiedades térmicas y electromagnéticas.
- Fibra de carbono, aramidas y otros materiales compuestos.
- Cobre (incrementa uso de un 75 a 80% debido a los devanados del motor eléctrico y el aumento de arneses).
- Semiconductores (dispositivos electrónicos de control, comunicaciones y potencia).
- Litio, cobalto y grafito