En el ecosistema industrial mexicano, Sonora destaca como uno de los Estados más productivos en el sector de energía y autopartes. A nivel del Gobierno Federal, el Plan México anunciado en enero de este año fijó objetivos oficiales e inversiones para la promoción de la movilidad sostenible.
Pero además, el Plan Sonora de Energías Sostenibles posicionará al Estado como líder en energías limpias y electromovilidad. Por supuesto, estos días están teñidos de la incertidumbre relacionada con las amenazas arancelarias del gobierno estadounidense a las importaciones de México.
En ese contexto, la directora del Clúster Automotriz de Sonora (CLAS), Gertie M. Agraz-Boeneker, dialoga con Mobility Portal Latinoamérica sobre la actualidad de esta unidad productiva.
“Pueden pasar muchas cosas, ¿no? Ahora mismo no hay mucha información, incluso del gobierno. Estamos hablando de aranceles, pero en realidad es para frenar un tema de cruce de drogas o de migración” analiza al principio de la charla.

Gertie M. Agraz-Boeneker, Directora del Clúster Automotriz de Sonora.
–¿Cómo percibe el sector automotriz estas idas y venidas?
-Todo ese tema preocupa en general. Ante la amenaza de aranceles se detienen los envíos a Estados Unidos, o sea, cuando tuvimos la primera amenaza fue así.
En el momento en que cruzas la frontera, ya tendrías un 25% de costo agregado al producto, entonces automáticamente se detuvieron, pero pues al día siguiente que ya se dijo, “ok, no hay”, bueno, pues ya se reanudó todo de manera normal hasta nuevo aviso.
No es algo que no hayamos vivido. La realidad es que la primera administración del presidente Trump tuvo también sus temas, y eso afecta mucho al sector en general; no permite que fluyan las inversiones ni el comercio.
-¿Hay preocupación a la hora de planificar producción?
-Nosotros tenemos aquí una armadora que es de Ford Motor Company, que exporta cerca de 350 mil vehículos por año a los Estados Unidos. El 85% de la producción se envía allí.
Entonces, sí, hay un nerviosismo, por supuesto. Incluso los productores de componentes que tenemos en el Estado, tienen clientes en los Estados Unidos, entonces, bueno, se está observando todo con atención.
La movilidad eléctrica en México atrae inversiones
Las políticas públicas que el país encara hacia la descarbonización urbana -beneficios de circulación, exención o descuentos en impuestos, aranceles 0 de importación de vehículos- han dado frutos: las ventas en 2024 fueron casi 70 mil entre BEV y PHEV, lo cual significó un incremento de 83,8% respecto del año anterior, según EMA (Electro Movilidad Asociación).
-¿A qué atribuye las buenas cifras de ventas de electrificados?
-No sé si para bien o para mal, pero ha habido mucha entrada de marcas chinas. Tenemos muchos distribuidores. Yo estoy en Hermosillo, que es la capital del Estado y ahora vemos una especie de “boom” te diría que casi exagerado, de esas marcas. Incluso distribuidores que vendían autos de fabricantes tradicionales como Ford, GM, Chrysler, están ahora distribuyendo marcas chinas.

El «Proyecto Olinia» de un vehículo eléctrico mexicano busca inversiones para despegar.
-¿Cómo será la participación de Sonora en el Proyecto Olinia?
-Está en una fase muy temprana el proyecto; hay un tema de diseño del vehículo que se está haciendo en universidades mexicanas. Ya han tenido algunas conversaciones con posibles proveedores de autopartes. Creo que era momento de pensar en un carro mexicano, tenemos buenas expectativas aunque, por ahora se ve como muy básico.
Tiene que haber aprendizaje, derramarse el conocimiento que ya tenemos del sector automotriz, así es que esperamos que aproveche.
Sería bueno que en esta etapa de diseño se acerquen un poquito más a quienes hacen la manufactura de los carros, poner a conversar a los equipos y hacer diseños que sean 100% viables desde el inicio.
-El gobernador Durazo Montaño firmó un memorándum con Foxconn. ¿Cómo lo ven?
-Las conversaciones hasta donde vemos nosotros van bien, sería una de las inversiones más importantes para el Estado. Tenemos muy cerca la frontera con Arizona, que es el que ha recibido la mayor inversión en temas de semiconductores en estos últimos dos años (Taiwan Semiconductor Manufacturing e Intel, específicamente).
Es un sector nuevo para el Estado, pero que se puede desarrollar como parte de este Plan Sonora.
-¿Cómo considera que avanza la producción nacional en cuanto a electromovilidad?
-Si bien es un poco difícil tener estadísticas completas y definitivas, podemos tomar como ejemplo los datos del INEGI (Instituto Nacional de Estadística y Geografía) que cita 169.929 vehículos híbridos y eléctricos producidos en México el año pasado. Comparado con el año anterior es casi el 60% más de producción de vehículos eléctricos.
Entonces, esto es algo que está creciendo, básicamente hoy producen vehículos electrificados Toyota, Ford tiene una “versión eléctrica” del Mustang, no se parece para nada al Mustang, pero le llaman Mach-E, y es un vehículo 100% eléctrico.
Ford, en Sonora, hace una versión híbrida del pick up Maverick; cerca de 108 mil unidades por año, aunque no está contabilizada en el dato de INEGI, porque no tiene la etiqueta de “vehículo híbrido”. Pero las inversiones están también yendo hacia ese sector.
-¿La infraestructura de carga va de la mano con la demanda de autos eléctricos?
-En México es algo incipiente todavía. Pero por lo que estuve hablando con algunos importadores que traen vehículos chinos, las empresas de allá están haciendo inversiones en energía, paneles solares, por ejemplo, y es de esperar que se metan en la carga y baterías.
De alguna manera van integrando una cadena de valor que a ellos les sirva para el momento en que puedan producir un vehículo en México.